En el marco de ArteBA, la galería Foster Catena armó su propia «celebración»: un brunch en su espectacular terraza de Palermo para agasajar a coleccionistas, amigos y artistas.
Con la dirección artística de Inés Huergo, y en el cada vez menos atípico horario del mediodía del sábado, reunió tres disciplinas que se combinaron para amenizar la recorrida por la serie de fotos Movimiento Perpetuo, de Marcelo Grossman. Por un lado, una instalación gastronómica a cargo de Marcia Krygier; por otro la danza, en la performance de Florencia Vecino y la musicalizacion de Soledad Rodríguez Zubieta, que a lo largo de las 4 horas se pasó por diferentes géneros y climas: de los ritmos latinos al R&B, y de Nat King Cole a Daft Punk.